El pasado 17 de diciembre fue mi cumpleaños e hice esta tarta que vi en el blog La receta de la Felicidad. Si entráis a echar un vistazo en el blog de Sandra veréis que la suya queda maravillosamente bonita. La mía quedó bien pero me habría encantado haber encontrado galletas de chocolate. ¡En fin, hay que adaptarse! La tarta está riquísima, a la gente le gustó mucho, y encima no necesita más que un molde desmoldable, una batidora, y la nevera.
Los ingredientes para 10 raciones monstruosas:
Para la base y bordes de galleta:
350gr de galletas de chocolate (si no las encontráis, pues galletas María de toda la vida).
175gr de mantequilla.
50gr de azúcar.
1 cucharilla de canela.
1 pizca de sal.
Para el relleno:
500gr de queso en crema.
200gr de azúcar.
250ml de nata líquida para montar (35% M.G.). (Si encontráis Double Cream mejor que mejor).
Para la crema de chocolate:
100gr de chocolate de cobertura-
100ml de nata líquida para montar.
Lo primero: como soy una comodona, metí en el robot de cocina las galletas y las trituré. Luego eché el azúcar, la canela, y la mantequilla, y seguí mezclando hasta que estuvo todo con una textura como de pan rallado húmedo. Cogí el molde desmoldable, lo pinté bien por dentro con aceite de girasol, y le puse la base de galletas y cubrí los laterales procurando que quedaran con un grosor similar. Aplané un poco los bordes y lo metí en la nevera.
Después: En una cazuela pequeña se echan 100ml de nata líquida y se pone a calentar. Cuando quiera empezar a hervir, se apaga el fuego y se echa el chocolate troceado. Se mezcla bien con una cuchara hasta que esté disuelto y se echa sobre la base de galletas. Deja un poco de chocolate en la cazuela para luego decorar la tarta por encima.
Seguimos:en un bowl eché el queso en crema y lo batí con una batidora de varillas. Le eché el azúcar y seguí batiendo hasta que quedara bien unido. Luego monté la nata en otro bowl y la fui agregando a la mezcla de queso con una cuchara, con movimientos envolvente de abajo a arriba. Saca el molde con la galleta de la nevera y echa la mezcla de queso, que quede bien cubierto.
Final: con ayuda de una manga pastelera, o con un decomax, haz un dibujo con el chocolate líquido. Hay muchas opciones. También puedes, con una cuchara, echar el chocolate sobre la tarta formando líneas irregulares de un lado para otro.
Esta tarta es mejor tenerla en la nevera toda la noche porque, cuanto más fría esté, más firme quedará el relleno. Espero que os guste tanto como me ha gustado a mi.
¡Aprovecho para desearos un Feliz Año Nuevo!
Los ingredientes para 10 raciones monstruosas:
Para la base y bordes de galleta:
350gr de galletas de chocolate (si no las encontráis, pues galletas María de toda la vida).
175gr de mantequilla.
50gr de azúcar.
1 cucharilla de canela.
1 pizca de sal.
Para el relleno:
500gr de queso en crema.
200gr de azúcar.
250ml de nata líquida para montar (35% M.G.). (Si encontráis Double Cream mejor que mejor).
Para la crema de chocolate:
100gr de chocolate de cobertura-
100ml de nata líquida para montar.
Lo primero: como soy una comodona, metí en el robot de cocina las galletas y las trituré. Luego eché el azúcar, la canela, y la mantequilla, y seguí mezclando hasta que estuvo todo con una textura como de pan rallado húmedo. Cogí el molde desmoldable, lo pinté bien por dentro con aceite de girasol, y le puse la base de galletas y cubrí los laterales procurando que quedaran con un grosor similar. Aplané un poco los bordes y lo metí en la nevera.
Después: En una cazuela pequeña se echan 100ml de nata líquida y se pone a calentar. Cuando quiera empezar a hervir, se apaga el fuego y se echa el chocolate troceado. Se mezcla bien con una cuchara hasta que esté disuelto y se echa sobre la base de galletas. Deja un poco de chocolate en la cazuela para luego decorar la tarta por encima.
Seguimos:en un bowl eché el queso en crema y lo batí con una batidora de varillas. Le eché el azúcar y seguí batiendo hasta que quedara bien unido. Luego monté la nata en otro bowl y la fui agregando a la mezcla de queso con una cuchara, con movimientos envolvente de abajo a arriba. Saca el molde con la galleta de la nevera y echa la mezcla de queso, que quede bien cubierto.
Final: con ayuda de una manga pastelera, o con un decomax, haz un dibujo con el chocolate líquido. Hay muchas opciones. También puedes, con una cuchara, echar el chocolate sobre la tarta formando líneas irregulares de un lado para otro.
Esta tarta es mejor tenerla en la nevera toda la noche porque, cuanto más fría esté, más firme quedará el relleno. Espero que os guste tanto como me ha gustado a mi.
¡Aprovecho para desearos un Feliz Año Nuevo!