sábado, 18 de agosto de 2012

Salteado de verduras, cerdo, y 5 especias con tallarines chinos.


Anoche estuve curioseando en Amazon algunos libros de cocina de chefs que me gustan, como por ejemplo Ching He Huang, que acaba de sacar libro y programa en la BBC con Ken Hom, se llama Exploring China: A culinary adventure: 100 recipes from our journey.  Ya casi estoy decidida a comprarmelo y más desde que anoche pude ver en Youtube el primer capítulo del programa. Aparte de morirme de la envidia ante el viaje culinario que se pegan estos dos, me entraron unas ganas enfermizas de cenar comida china. Lo-que-fuera, pero hecho en casa y en el wok. Así que husmeé en mi nevera y esto fue con lo que me encontré:

Los ingredientes:
1 paquete de tallarines instantáneos (yo suelo usar los de la marca Demae Ramen)
1 trozo de jengibre de 1 centímetro.
1 diente de ajo.
Media cebolla.
1 puerro baby, de esos pequeñitos, que ya se estaba quedando mustio en la nevera.
1 calabacín pequeño.
200gr de carne de cerdo cortada en trozos tamaño bocado.
Media cucharilla de maicena.
50ml de vino blanco.
50ml de salsa de soja clara.
1/4 de cucharilla de mezcla de 5 especias.
Media cucharilla de sal.
1 cucharada de salsa de soja oscura.
1 cucharada de aceite de sésamo.
2 cucharadas de aceite de girasol.

¿Os habéis asustado con la lista de ingredientes? Gran parte de ellos se compran a un precio bajo en las tiendas chinas y luego duran mucho tiempo. Merece la pena tenerlos en el armario de las especias.

Lo primero: Pela el diente de ajo y el jengibre y pícalos bien fino. Pela el calabacín y pártelo en trozos pequeños.  Pela el puerro, lávalo, y córtalo en rodajas finas. Pela la cebolla y córtala en rodajas finas. Ahora deberás tener en un plato grande todas las verduras listas para ser usadas. En un bowl aparte pon la carne de cerdo y échale el polvo de 5 especias, la maicena, el vino blanco y la salsa de soja. Remueve bien con una cuchara para que se marine bien con la salsa mientras cocinamos las verduras.

Después: pon un wok a fuego fuerte y echa dos cucharadas de aceite de girasol. Cuando empiece a salir humo, echa el ajo y el jenjibre hasta que se empiecen a dorar. Luego echa la cebolla, el puerro y el calabacín. Deja que se hagan unos 5 minutos mientras los mueves con una cuchara de madera. Luego echa 50ml de agua y pon la tapa al wok para que el vapor termine de ablandar los vegetales (si te gusta que crujan, puedes obviar este paso). Déjalos 3 minutos y luego quita la tapa. Aparta los vegetales a un lado del wok y echa la carne  con el jugo de la marinada. No la muevas hasta que se haya hecho bien por un lado. Luego muévela hasta que se dore por todas partes. Mezcla con las verduras y apaga el fuego.

Final: Pon agua a hervir en una cazuela pequeña para hacer los tallarines instantáneos según las instrucciones del fabricante. Luego escúrrelos y échalos en el wok. Echa la salsa de soja oscura, la sal, y el aceite de sésamo y remuévelo todo para que se mezcle bien.

¡Ahora ya sólo queda servirlo en un bowl y comerlo bien caliente!


Ñoquis con salsa de tomate y jengibre.


No hay nada más socorrido que tener en la nevera un paquete de ñoquis de patata, de esos que venden refrigerados en los supermercados. Por si solos no tienen demasiado sabor pero tienen la peculiaridad de absorver perfectamente los sabores de las salsas con las que suelen acompañarse. En esta ocasión los preparé con una salsa de tomate un poco distinta a la que suelo hacer. El toque dulce que le da la zanahoria y el jengibre le daba un matiz exótico y muy agradable al paladar.

Los ingredientes para 4 raciones de salsa de tomate:

1 lata de tomate triturado de 800gr.
Un trozo de 2cm de jengibre fresco.
2 dientes de ajo.
2 zanahorias pequeñas o 1 grande.
1 cebolla mediana.
2 cucharadas de aceite de oliva.
1 cucharilla rasa de sal.
2 cucharillas rasas de azúcar.
1 cucharada de perejil picado.

Empezamos: Pela el trozo de jengibre, las zanahorias, los dientes de ajo y la cebolla. Pícalo todo bien fino con un cuchillo o, si tienes un procesador (triturador) de alimentos, con él. Mucho más cómodo y se pueden encontrar a buen precio en el mercado.

Seguimos: En una cazuela mediana echa el aceite de oliva y ponlo a fuego medio. Cuando el aceite esté caliente, agrega las verduras y sofríelas unos 6 minutos hasta que empiecen a ablandarse. Echa ahora la sal, el azúcar, el perejil, y el tomate triturado. Revuelve bien con una cuchara de madera, y déjalo cocer a fuego medio con la tapa sin poner del todo, unos 40 minutos.

Final: Cinco minutos antes de que termine de hacerse el tomate, pon agua a calentar en una cazuela con sal y una cucharada de aceite de oliva. Cuando empiece a hervir echa los ñoquis y deja que cuezan al menos 3 minutos. Luego escúrrelos con un escurridor y échalos en la salsa de tomate. 

Calabacines a la Siciliana


Hace mucho, mucho tiempo, un compañero de trabajo me habló de esta receta. No podría dar una explicación de por qué he tardado tanto en hacerla porque el resultado es magnífico y el trabajo prácticamente inexistente.

Los ingredientes para dos raciones generosas:
1 calabacín mediano.
1 cebolla mediana.
2 patatas medianas.
1/4 de taza de pan rallado.
1/4 de taza de queso parmesano rallado.
1 chorro de aceite de oliva.
Sal y pimienta negra al gusto.

Lo primero: como siempre, es preparar los ingredientes antes de cocinarlos; pela y lava las patatas. Córtalas en rodajas de un centímetro de grosor. Luego pela el calabacín y córtalo en rodajas de un centímetro. Pela la cebolla y pártela al medio. Luego lamínala en rodajas del mismo grosor. Salpimienta las verduras.
Después: en una fuente apta para horno pon una capa de calabacín, otra de patata y otra de cebolla. Repite la operación hasta que hayas colocado todas las verduras. Espolvorea el pan rallado por encima y el queso parmesano rallado. Riega con un chorro de aceite de oliva.
Final: Mételo en el horno precalentado a 200ºC unos 30 minutos.