O Strawberry Cheesecake, que es lo mismo pero dicho más corto... Esta noche tengo cena en casa y no sabía qué hacer de postre. Navegando por la red vi una receta de una maravillosa tarta de queso de dulce de leche y, con unas cuantas variaciones, ha salido esta tarta que sabe igual que los petitsuisse de fresa (danoninos). Prometo que la de dulce de leche la haré en otra ocasión....
Los ingredientes:
125ml de agua (medio vaso).
1 sobre de gelatina de fresa.
1 paquete de queso philadelphia.
1 lata pequeña de leche condensada (o 1/2 grande).
2 cucharadas de extracto de vainilla.
1 taza de crema espesa (la venden en Carrefour de su marca, está al lado de las natas líquidas normales).
1 cucharada de azúcar.
1 paquete de galletas María.
100gr mantequilla.
Lo primero: Pon en un cazo el agua a hervir y, cuando esté en ebullición, echa la gelatina. Remueve bien para que se disuelva y apaga el fuego. Mientras enfría un poco, coge la crema espesa y el azúcar en un bowl y bátelo bien con la batidora de varillas hasta que la crema espese.
Después: En otro bowl pon el queso, la leche condensada, y la vainilla. Remuevelo hasta que sea una mezcla cremosa. Ahora coge las galletas y mételas dentro de una bolsa. Con un rodillo, machácalas hasta que queden hechas migas. Mete la mantequilla en el micro un minuto a potencia media para que se derrita. Mezcla la mantequilla con las galletas y echalas sobre el fondo de un molde desmoldable. Presiona con los dedos para hacer la base de la tarta.
Final: Agrega ahora la gelatina a la mezcla de queso y ve removiendo para integrarla. Cuando lo tengas, ve echando la crema espesa y mezclando con una cuchara. Cuando ya estén todos los ingredientes juntos, viertes la mezcla sobre la base de galletas, lo cubres con papel de plata, y lo metes a la nevera para que cuaje. La receta original dice que unas 3 horas pero doy fe de que no es cierto. Mejor dejarlo toda la noche.
Al día siguiente, sólo tenéis que echarle por encima cualquier mermelada o sirope, (yo he echado un sirope de arándanos mezclado con leche condensada), y quitar el aro. ¡Y ya lo tenéis!
Los ingredientes:
125ml de agua (medio vaso).
1 sobre de gelatina de fresa.
1 paquete de queso philadelphia.
1 lata pequeña de leche condensada (o 1/2 grande).
2 cucharadas de extracto de vainilla.
1 taza de crema espesa (la venden en Carrefour de su marca, está al lado de las natas líquidas normales).
1 cucharada de azúcar.
1 paquete de galletas María.
100gr mantequilla.
Lo primero: Pon en un cazo el agua a hervir y, cuando esté en ebullición, echa la gelatina. Remueve bien para que se disuelva y apaga el fuego. Mientras enfría un poco, coge la crema espesa y el azúcar en un bowl y bátelo bien con la batidora de varillas hasta que la crema espese.
Después: En otro bowl pon el queso, la leche condensada, y la vainilla. Remuevelo hasta que sea una mezcla cremosa. Ahora coge las galletas y mételas dentro de una bolsa. Con un rodillo, machácalas hasta que queden hechas migas. Mete la mantequilla en el micro un minuto a potencia media para que se derrita. Mezcla la mantequilla con las galletas y echalas sobre el fondo de un molde desmoldable. Presiona con los dedos para hacer la base de la tarta.
Final: Agrega ahora la gelatina a la mezcla de queso y ve removiendo para integrarla. Cuando lo tengas, ve echando la crema espesa y mezclando con una cuchara. Cuando ya estén todos los ingredientes juntos, viertes la mezcla sobre la base de galletas, lo cubres con papel de plata, y lo metes a la nevera para que cuaje. La receta original dice que unas 3 horas pero doy fe de que no es cierto. Mejor dejarlo toda la noche.
Al día siguiente, sólo tenéis que echarle por encima cualquier mermelada o sirope, (yo he echado un sirope de arándanos mezclado con leche condensada), y quitar el aro. ¡Y ya lo tenéis!
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